Existen diversos motivos de peso por los que los conductores tienen que cambiar los neumáticos de su vehículo en su totalidad:
Si tienes que cambiar los neumáticos por los motivos n.º 2 o n.º 3, comprueba asimismo que el neumático de repuesto no tiene daños, así como la edad del mismo. Cámbialo por uno nuevo si es necesario.
Da igual el motivo por el que haya que cambiar de neumático, hacerlo es bastante sencillo. Provistos de herramientas básicas y de nuestra guía paso a paso, los propietarios de los vehículos se las pueden apañar solos a la hora de llevar a cabo esta tarea esencial.
1. La seguridad es lo primero: antes de comenzar, haz lo siguiente.
2. Quita el tapacubos o la cubierta de la rueda, si lo hay.
3. Afloja las tuercas de las ruedas sin quitarlas utilizando una llave para tuercas de rueda.
Solo hay que aflojarlas lo suficiente para facilitar su retirada una vez que hayas elevado el vehículo. ¿Están demasiado apretadas las tuercas? Con cuidado, puedes ejercer presión en la llave con el pie, asegurándote de que esté en posición horizontal.
4. Eleva el coche.
Coloca el gato bajo el coche. Si no estás seguro de dónde colocarlo, en el manual de tu coche se indica el lugar correcto donde colocar el gato. Eleva el coche lentamente y con suavidad hasta que la rueda que vayas a cambiar esté a unos 15 cm por encima del suelo.
5. Quita las tuercas de las ruedas.
Una vez aflojadas (paso n.º 3), puedes quitarlas manualmente. Asegúrate de dejarlas en un lugar seguro.
6. Quita la rueda.
Tira de ella hacia ti con las dos manos. Apártala a un lado para que no moleste.
Importante: Si estás cambiando un juego de neumáticos completo y vas a guardarlos, etiqueta cada uno de ellos con tiza cuando los quites. Por ejemplo: DI (delantero izquierdo), DD (delantero derecho) y así. ¿Por qué? De esta forma, puedes controlar dónde iba colocado cada uno, y tenlo en cuenta si consideras la posibilidad de rotar neumáticos cuando vuelvas a instalarlos en el futuro.
7. Cambia el neumático.
8. Aprieta las tuercas de las ruedas.
Al principio, hazlo manualmente. Las tuercas se tienen que apretar siempre de una en una, siguiendo una secuencia diagonalmente opuesta, es decir, primero se aprieta una y luego la que sea diagonalmente opuesta a ella, no la que esté justo al lado.
9. Baja el vehículo y aprieta las tuercas con la llave.
Como cuando aflojaste las tuercas, puedes ejercer una presión extra con el pie sobre la llave para tuercas cuando está en posición horizontal al apretar las tuercas. Por lo general, hay que usar una llave dinamométrica empleando la fuerza adecuada; de lo contrario, se puede dañar las tuercas, elongándolas.
10. Vuelve a colocar el tapacubos o la cubierta de la rueda.
Pregunta: He cambiado el neumático pinchado. ¿Puedo dejar puesto el neumático de repuesto?
R: No. Por lo general, los neumáticos de repuesto temporales tienen un tamaño distinto. Son más ligeros, más pequeños, y no soportan las mismas velocidades ni pueden utilizarse tantos kilómetros como los neumáticos permanentes. La estabilidad del vehículo podría verse afectada durante la conducción. No obstante, la excepción a esta regla es que el neumático de repuesto coincida completamente en tamaño con los demás neumáticos del vehículo.
11. ¿Has cambiado algún neumático pinchado?
Pon el neumático pinchado en el maletero y llévaselo a un profesional de neumáticos para que lo repare o lo cambie por un neumático de tamaño completo y permanente.
¿No te ves seguro? ¿Te falta el equipo necesario? No dudes en solicitar la ayuda de un profesional de neumáticos. Podrá cambiar el neumático pinchado —o cambiar los neumáticos de esa estación— con total confianza. Consejo: cuando esté en ello, asegúrate de pedir que haga una comprobación completa y exhaustiva de todos los neumáticos, incluyendo el de repuesto.